Iñaki Vázquez Larrea
Doctor en Antropología

Imagen: Juan Gabriel Vich

En 1987 tenía quince años. Mis padres eran de Trintxerpe y yo jugaba al futbol en el equipo de la quinta provincia gallega. Mis únicos intereses pasaban por acudir a Atotxa y alucinar con el Appetite for Destruction (Apetito por la destrucción), de los recién formados Guns n´Roses. Las historias de Axl Rose y cía, y aquel Bienvenidos a la jungla!!, casaban, bastante bien, con los que bautizamos con plomo nuestros primeros años de adolescencia en Euskadi.

En la ikastola no leíamos nada, ni por asomo una mirilla en verso o prosa. Recuerdo que ese mismo año, en el bar Velasco de Trintxerpe, alguien dijo aquello de que un escritor famosohablaba, por primera vez, de nosotros, los de la puta mar de Terranova. El éxito de La mar es mala mujer fue tal que nos trajo a Pasajes a la propia Amparo Larrañaga, con el rodaje de Terranova (1990), y ella recreando el personaje de Ainara.

Recuerdo aquel comentario entre, orgulloso y jocoso, de mi difunto padre sobre la novela. Me explicó que mi abuelo, el gallego, también estuvo en Terranova, pero sin fischfinder, como Antxon Elizalde en la obra. Aquella fue la llave de entrada de Raúl Guerra Garrido y de la literatura vasca en casa.