Jesús Rivera Navarro
Catedrático en la Universidad de Salamanca
Fecha de publicación: 24/05/20
En tiempos de confinamiento, de aislamiento, de soledad o de obligada convivencia, en los lugares más oscuros, refugio de intolerantes La memoria extinguida, olvido forzado para no seguir en una noria infinita, con vocación de reiterar el mito de Sísifo, odio y condena Estrategias políticas de unos y otros, rédito electoral, fines partidistas, basura en los mugrientos muladares de la representación pública España dividida en varios bandos, incapacidad para entenderse, insolvencia para utilizar la dialéctica, esclavos de un pasado cainita Los años tristes del tiro en la nuca, la amenaza, los atentados llenos de sangre y lodo, la pólvora y sus consecuencias, los coches bombas y los gritos Los funerales de Estado, las balas en el aire, las huellas de la incomunicación, los anuncios sin alma, las proclamas reiteradas e irrelevantes Regreso fugaz a los años 90, cuando el conflicto parecía que nunca acabaría, cuando la ira se cebaba en personas y seres humanos indefensos Pintura roja en las paredes de un portal, en Bilbao, pasquines que reivindican la libertad de los presos, con acciones que justifican lo que denuncian Intimidación individual que implica un chantaje a varios colectivos, nostálgicos de la Kale Borroka huyen en la silenciosa noche del estado de alarma